Flujos de las Cuatro Estaciones
Flujos de las Cuatro Estaciones
I
Primavera
Renovación
Así como se renueva la naturaleza,
así como se renueva de invierno a primavera,
así como se renueva el nuevo ciclo,
así como la serpiente muda de piel
y se enrosca en el círculo de la renovación,
así como el águila renueva el plumaje;
así como uno se renueva de vestidura y traje,
hay que seguir la ley natural
de renovarse cada año.
Cambiar el traje de la tristeza
por el traje de la alegría,
cambiar el traje de la noche
por el traje del nuevo día.
Renovar cada pensamiento
desde la introspección
hacia toda la purificación
de sentimientos en el corazón
hacia el ideal de paz,
luz y fraternidad
hacia toda la humanidad.
II
Verano
Sol de verano
El ardiente sol de verano,
ruge el sol con todo su calor
y nos regala una canción azul
con el cielo pleno de algodón
y la brisa canta como soprano
y se enciende a plenitud el verano.
Así celebran los días de candor
del verano cálido azuloso
con atardeceres naranjas y magentas
que vibra en canción violeta.
III
Otoño
La cosecha cuesta colectar los frutos
No hay trabajo fácil,
ni triunfo barato,
todo cuesta esfuerzo,
todo éxito cuesta fatigas,
todo sueño cuesta realizarlo;
todo en la vida hay que ganárselo
con el sudor de la frente;
toda conquista cuesta empeño,
cosechar cuesta colectar los frutos.
Sueña, trabaja, lucha,
si la suerte cambia tus metas,
sueña y lucha por otras.
IV
Invierno
Ensoñaciones Estelares
Que las canciones de Noche Buena,
que las canciones de Navidad,
que las canciones de la Noche Vieja,
que las canciones del Nuevo Año,
y las canciones de las Reyadas,
mas las canciones de las Octavitas,
hagan que, llueva Concordia,
que disuelva la discordia,
que los Corazones de Oro
no decaigan en plomo,
y que los corazones de plomo
cambien su Música a una de Alegría
que traiga Serenidad y Armonía,
para que, en Verdad, algún día,
vuelva la Hermandad que tuvo la humanidad
en las leyendas de esa Antigua Edad de Oro,
ese Paraíso Perdido lo Reconstruyamos,
Pidiéndole al señor lluvia que llueva Concordia
que disuelva la discordia,
que los Corazones de Oro
no decaigan en plomo,
y que los corazones de plomo
cambien su Música a una de Alegría
que traiga Serenidad y Armonía,
para que, en Verdad, algún día,
vuelva la Hermandad que tuvo la humanidad
en las leyendas de esa Antigua Edad de Oro,
y que los truenos, Relámpagos y centellas
anuncien la llegada de la Reconstrucción Armónica
de la Hermandad en la Humanidad
para que sepan que solo hay Arcoíris
solo si llueve en Concordia con el Sol.
Fernando José Padilla donfjp fjp
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